Este tipo de mascarillas contienen principios activos que gracias a la fácil adhesión del material en la piel, aumenta su penetración dérmica.
Creadas a partir de extractos de algas marinas, producto que se presenta a modo de polvo se necesita mezclar con agua, al generar este proceso se obtiene una mezcla tipo gel que será la base de la mascarilla.
Posteriormente se coloca un principio activo de acuerdo al efecto que se quiera conseguir.